Proyecto documental desarrollado desde el 2012 hasta el 2017, ganador de la Convocatoria a proyectos de foto y video para la salvaguardia del PCI 2017 organizado por la Unesco y Crespial.
La investigación sobre la festividad de San Martín de Porres en el poblado Canchimaleros inició en 2011 con el objeto de visivilizar en la sociedad ecuatoriana a los poblados afroecuatorianos de Borbón, San Lorenzo, Limones y Maldonado, que han sido estigmatizados como zonas de conflicto, violencia y delincuencia;
El proyecto pretende invertir estos paradigmas impulsando una perspectiva positiva de su alegría, fuerza, musicalidad y cultura, expresada en la fiesta de San Martín de Porres.
En el 2012, se realiza la primera intervención fotográfica y en 2014 una segunda; resultando en una exposición en la Alianza Francesa de la ciudad de Quito en abril del 2015; a partir de esa exposición se registra y documenta el evento en el 2016 y 2017.
Este proyecto se integra a la fotografía documental, pues busca recoger la información de la festividad a través de una investigación visual rigurosa; sin emabrgo apunta hacia la incursión en el imaginario y no hacia lo evidente, quiere encontrar un espacio de creación desde la imagen que supere las limitaciones de un mundo plagado de imágenes que folclorizan estas celebraciones, pues como sostiene Joan Fontcuberta, “Hoy en día vivimos en una Iconoesfera, en una especie de cueva, cargada de imágenes, y si vamos a habitar en la imagen, el problema es cómo sobrevivir en la imagen, por lo tanto la imagen rebasa el campo de lo estético y de lo conceptual y es así que entramos en la política, manejar imágenes implica, manejar el mundo, manejar espíritus, manejar conciencias” .
San Lorenzo y en general la zona norte del Ecuador, frontera con Colombia, riveras del río e islas circundantes, son conocidas como zonas peligrosas, cuando una persona decide emprender un viaje hacia estos lugares, siempre será una recomendación la precaución extrema y exagerada, y así comenzó esta aventura , con un pretexto y un rumor, en el 2011 realicé el primer acercamiento a Borbón para conocer mas de este lugar y sus espacios, la llegada coincidió con la celebración de las fiesta por San Martín de Porres (el santo negro), río arriba hacia la primera comunidad al sur, y fue entonces que en mi visión de provocar una mirada diferente hacia estos espacios desarrollé durante 5 años el documental Canchimaleros.
Maldonado el pueblo que me acogió, me abrió los ojos a una realidad que ahora quiero compartir, el amor y el orgullo, el fervor y el festejo, la alegría y la generosidad, la fuerza y el baile, los cantos y los nados, el color verde en su máxima expresión, la naturaleza hermana de la comunidad y la dependencia de la ruralidad, el aferrarse a la tierra y vivir de ella, eso es lo que Maldonado me enseñó.
El pretexto fué una fiesta, en una población en donde la pobreza es generalizada abunda la generosidad, los rituales están en las manos de los ancianos, a pocos niños les interesa y los jóvenes definitivamente están en otro baile, sin embargo de sus bocas sale solo orgullo y promesas, la fiesta y el santo tiene una importancia invisible, las mejores galas y rumbas, la comida abundante y la bebida ni se diga.
Este documental pretende invitar a todos a conocer la otra cara de esta región, pretende mantener vivo este patrimonio intangible, el sincretismo es la nueva escencia de estas fiestas, el motivo siempre será valido si el fin es la unión, este evento fortalece el orgullo de las personas de estas comunidades, el ser negro el tener carisma y ser cantores innatos, elevan el autoestima de las poblaciones afroecuatorianas, este documental se ilusiona, al pensar que este archivo y su presentación a los demás, generan empatia con estos espacios y una visibilidad mayor y alejada de los prejuicios pre-existentes.